miércoles, 4 de marzo de 2015

¿Cambiamos de actitud?

Hoy me he levantado apática. Sin ganas de trabajar. Quizás tú te has levantado igual. ¿Lo he elegido yo? o ¿es el día? Maldito día, sí. Vaya rollo, amargándome ya desde primera hora de la mañana. Creo que es la lluvia. Ahh, no, que hoy no llueve. Pues habrán bajado las presiones. O quizás... ¿hoy hay luna llena? Sí, sí, debe ser eso, la luna. Puff. Menos mal que tengo una explicación para este mal humor con el que me he despertado, que si no, no sé qué sería de mi hoy. Bueno, da igual porque así me voy a quedar todo el día. A ver si con un poco de suerte mañana me despierto de mejor humor...

Y así, ¿cuántas mañanas de la vida?, ¿cuántos días buscamos responsables fuera de nosotros?. Sin llegar a entender que no es fuera sino dentro donde hace frio o calor. Vivimos en permanentes, o quizás no permanentes pero si cíclicas, crisis de estado de ánimo. Pensando que nuestro estado, nuestra actitud, es algo difícil de cambiar. Y la verdad es que en realidad es algo muy sencillo. Pero de sencillo que es se vuelve complicado. 

Pues bien, lo que os propongo hoy es un método sencillo de 3 pasos para cambiar de actitud, de estado de ánimo (De un estado negativo a uno positivo. Aunque oye, si quieres pasar de positivo a negativo también te servirá. ¡Siéntete libre de sentir lo que quieras!). Es sencillo, pero eso sí, requiere constancia. Un poco de práctica diaria, te llevará a un cambio progresivo que de verdad te sorprenderá. Y cuanto más lo practiques más sencillo te resultará, y más naturalmente te saldrá realizarlo.

¿No me crees?. ¡Haces bien!. No me creas. Pruébalo y saca tus propias conclusiones.

Paso 1: Identifica que actitud o estado de ánimo tienes en este momento.

¿Cómo te encuentras en este momento? 
Estás enfadado, agobiado, cansado, frustrado, apático, triste, desmotivado, rabioso, bloqueado,...
Sea lo que sea, identifícalo, ponle un nombre; pero hazlo sin prejuicios, sin condiciones, sin críticas, sin excusas... hazlo lo más objetivamente que puedas.

"Ahora mismo me encuentro apática, no tengo ganas de escribir en este blog".


Paso 2: Dale las gracias a tu estado de ánimo, a tu actitud, por estar acompañándote.

Aunque te parezca absurdo, dale las gracias por estar en ti. Porque aunque quizás no seas muy consciente, ese estado tiene una intención positiva, tiene un buen motivo para estar ahí. Puede que no quiera que fracases en algo, o quiera hacerte ver que tienes que resolver algún problema o hablar con alguien, o simplemente sea su manera de decirte que necesitas descansar más. Quien sabe...
Si crees saber cuál es su intención positiva dale las gracias por ese motivo. Pero si no lo sabes, dale las gracias igualmente sea por lo que sea por lo que te acompaña. 

"Gracias apatía por estar hoy conmigo. Aunque no sé bien porque has venido hoy, cuando en realidad mi vida es estupenda y soy una persona muy activa, sé que estás para ayudarme a aprender algo. Gracias".


Paso 3: Elige que actitud o estado de ánimo quieres tener en lugar del que tienes.

¿Cómo te gustaría estar? 
Me gustaría estar contento, concentrado, sereno, proactivo, paciente, tolerante, alegre,... 
Decide qué actitud o que estado te gustaría tener, y al igual que en el paso 1, se claro y concreto, sin juicios, sin excusas, sin críticas. 
¿Qué quieres tú?

"Quiero estar más activa, y concentrada en lo que estoy escribiendo".



Ahora estarás pensando, "Ya, que lista ésta. Otra que quiere hacerme creer que con pensar como quiero estar, mágicamente me voy a encontrar mejor". 
No, no pretendo eso. Sólo contarte que en la mayoría de las ocasiones fracasamos, no porque no seamos capaces de hacer algo, si no porque no sabemos lo que queremos hacer. El hecho de ser consciente de cómo estás y de cómo quieres estar, hace que tu mente y tu cuerpo se pongan en funcionamiento para encontrar los recursos que ya tienes en ti y conseguir lo que te has propuesto. Empieza por darte a ti mismo información clara de como quieres estar, y poco a poco encontrarás los recursos para estar como quieres estar. 

Te invito a que no me creas, si no a que practiques este sencillo método cuando te encuentres en un estado que no te guste, que no sea el que quieras tener. Por la mañana al levantarte, cuando discutas con tu jefe, en un atasco en la carretera...

Puede parecerte un método absurdo, pero ¿tienes algo que perder? (a parte de la apatía...)

"Elige que actitud quieres tener en la vida, porque si no la eliges tú ella te elegirá a ti."


INgente. Coaching INterpersonal & Desarrollo INtegral



No hay comentarios:

Publicar un comentario